martes, 10 de enero de 2012

Suena el tic-tac del reloj,
los nervios comienzan a aparecer,
se acerca la hora, de volverte a ver.
El corazón late más fuerte,
aumenta su velocidad,
pasan los segundos, una eternidad.
El reloj se detiene, no avanza,
los minutos de detienen
yo me pregunto ¿qué pasa?
Me doi cuenta,
que no te veré,
y el ritmo de mi corazón comienza a descender.
Caigo en la cama,
comienzo a pensar,
no quiero pensarlo, pero... llegó nuestro final.

No hay comentarios:

Publicar un comentario