Es un sentimiento roto,
la rabia de lo perdido,
es el dolor de una herida,
la cicatriz del olvido.
Es la llama que se apaga,
el odio entre dos personas,
el que desde ahora,
 todo será diferente.

Un lagrima que cae,
en el suelo frío y gris,
es el amor ya perdido,
de lo que un día sentí.

No se sabe si es odio,
o resentimiento,
de lo único que estoy segura,
es que me duele muy dentro.
Ni una bala clavada,
en todo el corazón,
ni la peor puñalada,
de lo que un día fue amor.
Nada se compara,
a esa sensación,
de sentir tanto odio,
como siento yo.

Mirarte a los ojos,
estando callada,
con esa mirada,
que me delata.
mi corazón marca,
el compás de un te quiero,
mi sonrisa dice,
que por ti me muero.
Necesito verte,
no puedo callarme,
esto que llevo dentro,
está a punto de matarme.
No se que hacer,
no se como decir,
que cada vez que te veo,
mi corazón pierde el ritmo.

Las cosas tienen que cambiar

A llegado el momento,
de comenzar de nuevo,
de caminar juntos
sin detenernos.
De dejar atrás,
los malos recuerdos,
y llenar la vida,
de momentos nuevos.
A llegado el momento,
de decirte que te quiero,
que eres lo más importante,
de el mundo entero.
decítelo a la cara,
interrumpiendo un silencio.

Te fuiste, y ahora comienzo a extrañarte...

extraño esos besos tuyos, salidos de aquellos labios que nunca había probado.

extraño esas palabras que nunca dijimos, que no pronunciamos.

extraño aquellos momentos que soñé, pero que nunca vivimos.

Te extraño a ti, por ser mi todo y mi nada... te extraño a ti, por ser tú.